El pan de trigo sarraceno es energético, por lo que puede ser perfecto para consumir en épocas en las que necesitamos un extra de energia para afrontar el día. Rico en proteína, fibra y antioxidantes. Ayuda a combatir el estreñimiento y regula el tránsito intestinal.

El pan integral de trigo sarraceno se conserva en sitios fríos entre 10 y 15 días y cabe la posibilidad de congelarlo.

Es suave y fácil de digerir pero cabe destacar que la textura tiende a ser un poco húmeda. Este pan de sarraceno es bajo en grasa y saciante, contiene vitamina B3, magnesio, omega 6 y fibra por lo que además de ayudar a nuestra salud puede resultar un buen compañero para aquellas personas que necesiten controlar su peso.

Sugerimos tostarlo para su posterior consumo, esto potencia su sabor y le proporciona una textura crujiente.

Puede contener trazas de gluten. Puede contener sésamo y frutos de cáscara.